Más de veinte mil personas se han reunido en la Villa Mariana para celebrar la tradicional Romería-Ofrenda en honor a la Virgen del Pino, un evento que une a la comunidad en un gesto de solidaridad y devoción
La Romería del Pino ha sido el punto de encuentro para los vecinos de Valsequillo de Gran Canaria, quienes una vez más han deseado honrar a Nuestra Señora del Pino. Más de una veintena de carretas han transportado kilos de productos locales como ofrenda a la Virgen del Pino, los cuales serán destinados a ayudar a los más desfavorecidos.
Representantes de los 21 municipios de Gran Canaria, así como los Cabildos insulares y el municipio de Candelaria en Tenerife, que mantiene un hermanamiento especial con la Villa Mariana, han llevado sus ofrendas hasta la Virgen del Pino. La Romería-Ofrenda ha sido presentada, por niños y niñas de todos los municipios de Gran Canaria, a través de décimas compuestas por Yeray Rodríguez, destacado verseador y pregonero del Pino en 2019. Ana María Suárez y Carlos Sánchez representaron a Valsequillo de Gran Canaria con gran entusiasmo.
Cohesión social y orgullo
Antonio Morales, presidente del Cabildo de Gran Canaria, enfatizó la importancia de esta Romería, no solo como una cita relevante para los fieles, sino también como «un elemento de cohesión social, de orgullo y de pertenencia». Como es tradicional, el ganadero José Mayor, conocido como «Nonito», y sus yuntas de vacas llevaron la carreta del municipio. La Agrupación Folclórica «Lomitos de Correa» acompañó a la representación de la localidad con su música, añadiendo el toque festivo y cultural a la celebración.